Llegó mi siglo, ése de los libros, donde todo se acaba y comienza, se paga una luz y otra tarda en ponerse. Es como un fin del mundo tribal. Yo y mi mundo se mueren. Solos, en el confín de mis ideas y de mis méritos. Todo ha caducado.
No importa cuánto me haya esforzado.
Ser esposa, hacer de esposa, merecer de esposa; se acabó hace unos 5 años años.... sí: años, años...
Esposa= amiga, compañera, confidente, lavarropa, cocinera, secretaria, enfermera, administradora, vigía, consejera, cómplice, refugio,chofer, afanadora, maniquí, un solo cuerpo, una sola alma... divididos por una risa y un dolor al mismo tiempo.
Hoy soy esposa que quiere SER y punto.
Creyendo haber pasado la peor crisis de mi vida, Hoy viene a deshojarse otra rosa: ser mamá.
Cuando tus palabras son como un eco loco . Y de lo mucho dado poco serescata si acaso la memoria supera al dolor.
Algo así como la crisis de antes; donde dentro de tu corazón sientes cómo se caen las fotos, los diplomas, los recuerdos, las promesas; el aire perfumado, el calorcito de cuna, el dolor de parir...
vas construyendo con los años un refugio cada vez más grande, según cada hijo y sus tamaños..
según yo ; tibio, bien acondicionado,....
Para despertar en un tejado, de pronto hielo, frío escarcha...
Su corazón te reclama su dolor que es tuyo, que no quisiste nunca...
su dolor de SER y con ello ser tu hijo a.
Qué duro que ser madre parezca el producto de un capricho de unos novios despistados
que se casaron distraídos, hasta que el hilo delgado de no saber bien qué es amar;
se rompe y nos tira a todos juntos.
Qué duro no tener pretextos. Que fuerte que de pronto se aclare el panorama de haber sido joven,
niño herido; y herido encontró otro ser lastimado y se casaron. Y no fueron felices.
Qué duro para los hijos. Ese es el exilio al que me enfrento: Su corazón me necesita fuera de ellos
para poder entender éste dolor raro que no se sale, pero que se aminora si yo estoy fuera.
Me felicito por haber criado hijos capaces de oponerse a mí. Y de haberme hecho cuestionarme mis decisiones, sin querer hacerlo.
¿Porqué no puedo ser feliz? Porque el comienzo de éste cuento no es feliz.
Ese es el primer cuestionamiento.
Y no es porque yo quiera, es porque ES.
Porque ser feliz no estaba en mi mapa , estaba toda la lista de arriba y más.
Dentro de todo éste nudo que mis lágrimas han humedecido y desanudado de a poco;
me he ido encontrando, ora vez, si es que algún día supe de mí. Y supe de Dios.
Hoy sé que mi idea de dios no es DIOS. Tal vez un buen y santo teólogo se reiría,
yo no me río, me duele. Estoy enojada con mi idea de dios, que me lo ha ocultado tanto tiempo.
Quiero patear al mundo como se patea un blando balón y que se caiga toda ésa gente que me ha herido,
que me ha consolado en falso, aconsejado en falso, que sólo ha sido un lastre doloroso.
Toda esa gente que me programó para no verme como Dios me ve.
Pero se caerían tantos y tantas. Algunos a quienes amo. Otros que sólo recuerdo, otros que ya perdoné. Otros que no he identificado.
Los que forjan su felicidad a costa de hacer vivir a los demás en la pesadilla de una mentira oscura y densa como la muerte.
Y que quede sólo la gente que desea hacer el bien siempre
qué duro caerse de tu propio mundo al patearlo.
Es el fin de mi siglo , no tengo tantos años, pero todo es oscuro y finaliza de algún polvoso modo.
El amor redime y restaura....y si algo se salva es porque he amado con el corazón sangrante aún el dolor y la soledad y las desolaciones de no saber que lo que ves no existe....
pero no saber que eres un ciego que ve cosas...
pero eres ciego porque no puedes ver la realidad.
Gracias a Dios que él es Eterno y es el Creador....todo puede volver a comenzar siendo lo fundamentalmente mismo. Es decir algo así como "resetear" te.
Ya no quiero mundo... nada que sea mío... quiero el amor de quien es Camino Verdad y Vida...
Y por fin poderme ver como El me mira.
